La llegada de un nuevo hermanito a casa

Mi nombre es Cristina Medina, y soy Psicóloga infantil en Clínica Bonadea. Quería hablaros de uno de los temas por los que más acuden los papis a mi consulta: “la llegada de un nuevo hermanito a casa”.

La llegada de un nuevo hermanito a casa

La recuperación postparto no es solo recuperar la normalidad funcional a nivel físico. A menudo se nos olvida la recuperación emocional, pero no solo de la madre, también de los hijos mayores que tienen que adaptarse a la llegada de un nuevo miembro a la familia.

Si para los papás la llegada de otro hijo supone un cambio importante, para los niños que reciben al nuevo hermanito no lo es menos. Los niños, de la misma manera que los adultos, necesitan tiempo para adaptarse a la nueva situación.

 

ADAPTACIÓN

A menudo, tanto papás como hermanos se adaptan a la nueva situación sin ningún tipo de problema. Pero hay otros niños que se instalan en comportamientos inadecuados que parece que no fueran a superar nunca. En esta etapa la actitud de los padres cobra un papel determinante y eso es lo que intentamos transmitir a las familias que acuden a nuestra consulta cuando se sienten desbordados por  este motivo.

Al principio, los niños suelen  estar expectantes ante la llegada del bebe a casa pero poco después pueden aparecen los celos. Empiezan a llamar la atención, a comportarse de forma inadecuada o incluso su comportamiento se hace más infantil, como si hubiese una regresión a una etapa anterior. Por ejemplo pueden no querer comer solos cuando ya llevaban tiempo haciéndolo, no controlar esfínteres, despertarse por la noche o llorar sin motivo aparente.

Lo primero que los padres deben tener en cuenta es que esta “alteración” en la conducta de sus hijos es un proceso normal dentro del desarrollo evolutivo de los niños y responde a un proceso de adaptación a la nueva situación. En muchas ocasiones, la llegada de un hermanito provoca en los niños un sentimiento de frustración, debido a que interpretan que no son “atendidos” de la misma forma, con la misma intensidad, o exclusividad que antes de la llegada del “intruso” a casa.

Una vez que los padres comprenden el proceso, es importante consensuar una forma de actuar para ayudar al niño.  Las recomendaciones son sencillas de poner en práctica pero en muchas ocasiones la situación desborda a los papás por el propio proceso de adaptación en el que también se encuentran ellos.

 

PAUTAS GENERALES

De manera general estas son las pautas que debemos tener presentes para afrontar la situación:

  • Alabar la conducta positiva del niño en lugar de recriminarle las conductas negativas o inadecuadas. Es decir, dirigir la atención fundamentalmente a las conductas deseadas.
  • Ante llamadas de atención o “escenas de celos” (rabietas, desobediencia) puede aplicarse la retirada de atención o alguna de las técnicas de modificación de conducta.
  • No perder la calma y actuar con tranquilidad. Manifestarle nuestro descontento por su comportamiento y dejar de prestarle atención.
  • Recordarle las ventajas que tiene respecto al hermanito (realizar algunas actividades…)
  • Involucrarlos y hacerlos partícipes en el cuidado del hermano pequeño
  • Evitar que pierdan todo el protagonismo o que pasen a un segundo término cuando los amigos y familiares vengan a casa a conocer al bebe.
  • No alterar, en la medida de lo posible, las rutinas que el hijo mayor tenía antes de nacer el hermanito.
  • No dejar de realizar las actividades que anteriormente el hijo mayor tenía programadas.

 

 

No obstante, si las conductas son exageradas o desproporcionadas no dudes en consultarnos. Analizaremos tu caso de forma más concreta y podrás manejar la situación con mucha más facilidad de lo que imaginas.

 

Y si quieres anticiparte a esta situación y a otras relacionadas con el comportamiento de tus hijos, no dudes en apuntarte a Los talleres de padres de Clínica Bonadea

by Clínica Bonadea